Después de unos días compartiendo con vosotr@s la historia de mi hermana (que seguirá), tengo la necesidad de narrar cómo se está desarrollando el día de hoy, el día de la gran fiesta de la revista para la que trabajo y es que son las nueve y ya estamos preparados. El gran evento se inicia a las diez menos cuarto.
Hay tiempo. Hemos quedado en casa de Alex para vestirnos juntos y asesorarnos unos a otros, lo de siempre. Lupe irá con un vestido palabra de honor de color azul eléctrico de Amaya Urzuaga que hace destacar su piel morena. Inés con un cuerpo de color clarete de encaje sobre una falda que compró en un outlet de Juan Duyós. Mis contactos en la revista me consiguieron un traje de noche camel de Ángel Schlesser cruzado en la cintura y que adoro. Alex irá de riguroso negro pues esta época del año no sube mucho su ánimo. Ya os conté lo de su familia, y es que antes, por lo menos, intentaban guardar las apariencias, pero ahora es distinto, ya sabéis. Está bastante sensible y aunque desde hace mucho lo celebramos en mi casa (mi madre adoptó a mi amigo cuando Marta se fue a París) esta vez está convencido de que los Vázquez ni siquiera harán la llamadita de rigor.
Hemos bebido una cervecita y degustado una tapa y estamos on the mood, o sea, con ganas de juerga. No he comentando nada, pero falta Martín, el pintor. Tiene la invitación pues el propio Alex la deslizó bajo su puerta como acordaron, ya que él estaba exponiendo en Barcelona. No sé si al final aparecerá.
Última vez que me arreglo el pelo, lo juro. Cogemos las invitaciones y tomamos un taxi. Caminar con ciertos zapatos resulta misión imposible. Ya hay gente en la puerta, localizo a Jaime Beltrán. Allí está mi espíritu de las fiestas pasadas. Sigue igual. No ha cambiado nada: estupendísimo. Un Auténtico Encantador de Serpientes. Trago despacio para que nadie note que estoy a punto de hiperventilar.
Miro el suelo por donde piso y agarro fuerte a Alex, pero me quedo muerta cuando veo a nuestro bohemio, a Martín, apoyado en una columna admirando sin especial interés a las celebrities que sonríen en el photocall. Uno, dos, tres … Vale, está impresionante. De pronto, su mirada azul se choca con la mía. Respiro y me intento componer. Ahora me sonríe el espíritu de la fiesta presente.
Continuará …
Hay tiempo. Hemos quedado en casa de Alex para vestirnos juntos y asesorarnos unos a otros, lo de siempre. Lupe irá con un vestido palabra de honor de color azul eléctrico de Amaya Urzuaga que hace destacar su piel morena. Inés con un cuerpo de color clarete de encaje sobre una falda que compró en un outlet de Juan Duyós. Mis contactos en la revista me consiguieron un traje de noche camel de Ángel Schlesser cruzado en la cintura y que adoro. Alex irá de riguroso negro pues esta época del año no sube mucho su ánimo. Ya os conté lo de su familia, y es que antes, por lo menos, intentaban guardar las apariencias, pero ahora es distinto, ya sabéis. Está bastante sensible y aunque desde hace mucho lo celebramos en mi casa (mi madre adoptó a mi amigo cuando Marta se fue a París) esta vez está convencido de que los Vázquez ni siquiera harán la llamadita de rigor.
Hemos bebido una cervecita y degustado una tapa y estamos on the mood, o sea, con ganas de juerga. No he comentando nada, pero falta Martín, el pintor. Tiene la invitación pues el propio Alex la deslizó bajo su puerta como acordaron, ya que él estaba exponiendo en Barcelona. No sé si al final aparecerá.
Última vez que me arreglo el pelo, lo juro. Cogemos las invitaciones y tomamos un taxi. Caminar con ciertos zapatos resulta misión imposible. Ya hay gente en la puerta, localizo a Jaime Beltrán. Allí está mi espíritu de las fiestas pasadas. Sigue igual. No ha cambiado nada: estupendísimo. Un Auténtico Encantador de Serpientes. Trago despacio para que nadie note que estoy a punto de hiperventilar.
Miro el suelo por donde piso y agarro fuerte a Alex, pero me quedo muerta cuando veo a nuestro bohemio, a Martín, apoyado en una columna admirando sin especial interés a las celebrities que sonríen en el photocall. Uno, dos, tres … Vale, está impresionante. De pronto, su mirada azul se choca con la mía. Respiro y me intento componer. Ahora me sonríe el espíritu de la fiesta presente.
Continuará …
Comentarios
Publicar un comentario
Escribe conmigo las páginas de mi libro blog. Write with me the pages of my Blog Book. Muchas gracias!! Thanks