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Cabezas que vuelan

Llevo un tiempo escuchando la expresión "me vuela la cabeza" o "me explota la cabeza" para referirse a algo que te cambia, que te pone las creencias o los pensamientos patas arriba.

Decidí entonces enfocarme en qué me provoca eso a mí últimamente. Yo, mujer de fuertes arranques apasionados busco y trato de poner el foco.

Entonces, ahí está. En mi bolso, en mi mesilla... persiguiéndome o al revés, no sé, el alucinante libro "La Paleta Perfecta" de Lauren Wager (Hoai Books, 2019): Combinaciones de colores inspiradas en el arte, la moda y el diseño. Me obliga a probar con fusiones cromáticas que no imaginaba o que no había tenido en cuenta hasta que Lauren me lo ha chivado.



Esto me lleva a otra voladera de mi cabecita: el collage. Aquí entran mis colores, mis fotos y todas las locas ideas que se me ocurran en un mismo lugar. Idear lo que quiero contar y lograr sacar lo que necesito recortar. Después tocar con mis manos figuras, palabras, papel y detalles que se convierten en una adicción. Mi mente entra en otro estado, de verdad.



Por eso junto a mi pegamento, mi cutter y mis fotos, la música salta a escena. Me sorprende el brasileño Tiago Lorc con "Desconstrucao" (Reconstrucao, 2019) que me susurra una historia triste pero con una voz y sonidos que en mis auriculares me bajan del mundo durante 4.43 minutos. Y le siguen mi poeta Robe que me grita todo lo bueno y lo malo con "Donde se rompen las olas" (Destrozares, 2016). ¡Qué de palabras maneja y qué de emociones despierta! Otra vez vuela mi cabeza.

Esto engancha con la película que os recomiendo si queréis pasar un buen rato: "De la India a París en un mueble de Ikea" que es del año 2018 pero que me tocó con la escena de ligoteo más graciosa que recuerdo. Boommm.

Espero que muchas cosas os hagan explotar.

Love & Peace






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