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Friday. El viernes. Burbujas



Ya es viernes. He acabado de darlo todo (o casi todo lo que podía dar porque es el último día de la semana y estoy hecha polvo) y me dirijo al Urban Fashion Spa, donde hemos quedado con Inés.

Alex ha estado cubriendo la Pasarela Cibeles de Novias y está cerca de la Agencia de Publicidad de Lupe, así que iban juntos a que nos dieran un “meneíto” y lo que sea que nos ha preparado nuestra amiga.

Cuando llego ya están y la anfitriona nos espera en una salita de inspiración oriental con cara muy alegre.

Hello, chicos!- nos da la bienvenida y la intuyo nerviosa. Nos miramos los tres sabiendo que algo pasa y que debe ser gordo por cómo se comporta.

Dos señoritas vestidas de negro impecable salen a nuestro encuentro y nos entregan unos albornoces color chocolate que nos encantan y que desprenden olor a jazmín… No podíamos empezar mejor.

Entonces nos separamos y me visto en una habitación con olor a canela y almizcle que me pone on the mood. Ummm. La música que me rodea creo que es de Ravi Shankar (músico indio que en una época usaba para relajarme. Os lo recomiendo, escucharle os elevará…).

Estoy inmersa en una escena de las mil y una noches en una sala de tratamientos decorada con un gusto exquisito. Solo contemplarla provoca que me tranquilice y es que todo está cuidado al detalle. Así en la decoración se percibe que nada queda al azar y lo que me rodea, apliques, fotos, productos y hasta las toallas emanan espiritualidad, o al menos me provocan paz.

Bajo el albornoz chocolate que me abraza llevo un bikini que al verme en el espejo no me parece que quede mal, fashion no, pero favorecedor un poco.

Inés nos ha preparado un peeling que devolverá la frescura a nuestras pieles y después un masaje con aceites del Mediterráneo. Oh, my god ….

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