Ir al contenido principal

Corazones helados Frozen hearts

Hay veces que lees datos, encuestas, estudios que no te gustan. Avances que parecen retrasos. El otro día, una amiga me contó que tiene una mancha pequeñita, dolorosa, inapreciable para los demás en un órgano interno que bombea sangre y que se ocupa de que todo su cuerpo responda. Vivirá pero tendrá el corazón descolorido para siempre. El culpable ni lo sabe (ni le importa) y ya habrá borrado el brillo de muchos más. 




Lamentablemente, queda demostrado por la ciencia que los habitantes de este universo nos podemos sentir mal o morir de amor. El Síndrome Takotsubo nació para describir el corazón roto y el noventa por ciento de los afectad@s son mujeres (sí, es que somos un poco más dramáticas, dirán los más escépticos).

El que se entrega por completo jamás regresa entero, dicen. Sin embargo, quizá no haya otra forma de hacer la travesía esta que llaman vida. 

Es posible que en algún momento cuerdo, el hielo recuerde que le trataron como si fuera oro. 

Feliz otoño a tod@s¡¡¡


And sometimes read data, surveys, studies do not like. Advances that seem delays. The other day a friend told me that apparently has a slick, tiny, painful, invaluable for others in an internal organ that pumps blood and ensures that all your body responds. He will live but will have the faded heart forever. The culprit nor knows it and will already have removed the brightness of many more.



Unfortunately, it is scientifically proven that the habitants of this universe we may feel ill or die of love. Takotsubo´s  syndrome was born to describe heartbroken and ninety percent of the affected people  are women (yes, we're a little more dramatic, say the skeptics).

Which never completely comes back whole, they say. However, there may be no other way to make this journey called life.

Perhaps at some sane time, the ice will remember that you were treated like gold.


Happy autumn 2 everyone¡¡¡

Comentarios

Entradas populares de este blog

Soñar despierto y volar: Hipnonautas

Nuestro cerebro es infinitamente más fantástico de lo que estamos dispuestos a admitir. Tuve la suerte de tener una coach en el trabajo que si me oyera, me diría: "Te lo dije: mira tu realidad. Depende de ti". Visualiza, visualiza... Es algo que empecé a practicar hace tiempo y que me ha ido ayudando  en muchos momentos de la vida, de esos que no crees que vendrán pero que con esfuerzo suceden. Todo este derroche de pensamientos se lo debo al espectáculo de hipnosis "Hipnonautas"*  al que acudo en el Teatro Lara, que me devuelve esa sensación que a veces casi olvido de que todo depende de nosotros. A la hora del vermut, el maestro de ceremonias es Jorge Astyaro , un tipo alto, bien parecido, que con su voz nos conduce durante algo más de dos horas atravesando fronteras entre lo real y lo imaginado. Fascinante e incomprensible a partes iguales. Una momento de Hipnonautas Me confieso algo confundida porque sí me llegó pero por temor o pereza, no sé, n

Las horas

Vuelvo enroscada en un montón de sensaciones. Unas no quiero que me invadan y otras deseo que no me abandonen nunca. No me puedo dejar llevar por el temor ni por el mal rollo y adoro sentirme tan viva. Mis tardes se hacen relativamente elásticas gracias al montón de actividades y el chute de emociones que me están regalando muchos desconocidos que he descubierto. Lo comparto contigo porque tenemos que poder con esto. Después ya veremos cómo salir de lo demás. De momento a quemar horas disfrutando de la luz. A las 17:30 todos los días, Alicia G. Rey de Mindandtangle me da la paz. Me está enseñando a hacer yoga con mi cerebro a través de sus talleres de Zentangle. Muchas gracias de corazón. Está siendo toda una experiencia. A las 18:30, Eli Kapowski me inyecta energía mientras pincha desde su balcón everyday. Otro descubrimiento que me alegra el cautiverio. La DJ del Corona. Olé tú. Sigue, sigue. Sus sesiones colgadas en Mixcloud son la bomba. El Museo de Arte Moderno

Cabezas que vuelan

Llevo un tiempo escuchando la expresión "me vuela la cabeza" o "me explota la cabeza" para referirse a algo que te cambia, que te pone las creencias o los pensamientos patas arriba. Decidí entonces enfocarme en qué me provoca eso a mí últimamente. Yo, mujer de fuertes arranques apasionados busco y trato de poner el foco. Entonces, ahí está. En mi bolso, en mi mesilla... persiguiéndome o al revés, no sé, el alucinante libro "La Paleta Perfecta" de Lauren Wager (Hoai Books, 2019): Combinaciones de colores inspiradas en el arte, la moda y el diseño. Me obliga a probar con fusiones cromáticas que no imaginaba o que no había tenido en cuenta hasta que Lauren me lo ha chivado. Esto me lleva a otra voladera de mi cabecita: el collage. Aquí entran mis colores, mis fotos y todas las locas ideas que se me ocurran en un mismo lugar. Idear lo que quiero contar y lograr sacar lo que necesito recortar. Después tocar con mis manos figuras, palabras, papel y detal