Ir al contenido principal

1, 2, 3 ... Squinch¡¡¡

Pertenecer a un grupo, a un colectivo, a gente que cree en algo igual que tú te hace sentir bien. Si lo manejas con tiento, te puede hacer diferente.

Todo esto me ronda mientras paso un rato pegada a la tele, disfrutando de Chicago Fire y de The Good wife. En la primera de las series, un Departamento de bomberos se mueve por la ciudad  y descubres  sus vidas puestas en peligro al servicio de la comunidad. En la segunda, una abogada lucha por salir adelante en medio de todo tipo de pruebas vitales. Los Juzgados se hacen su segunda casa y el Despacho, la primera. Colectivos, colectivos.

Resultado de imagen de the good wife

Me vuelve el gusanillo de la justicia. De los casos enredados entre normas, lagunas legales y papeles. Muchos papeles. Pensé que nunca lo haría pero echo de menos ese rollo jurídico que tenía antes. Antes de muchas cosas. Me lo pienso. ¿Podría jugármela otra vez para buscarme un hueco entre papeles timbrados? Cumplo 40 pero no estoy muerta…

En esa búsqueda de pertenecer a algo, me encuentro con unos locos que me llenan la cabeza de pájaros sobre narraciones o películas que ya he disfrutado o que me tientan. Tenéis que probar. Son Todopoderosos, un podcast en el que el cine, la literatura y otros gustos se unen para darme más o menos dos horas de historias, de risas y de ganas de leer o ver.  Os invito. Quizá os queráis quedar, como yo.

Resultado de imagen de todopoderosos


En esta tendencia que me ha salido de agruparme, no sé muy bien por qué, me engancho a Urbanitas entre versos. Otro podcast donde descubro poesía moderna, doméstica, fresca y adaptable. Y escucho una canción de Los Secretos que ya había conocía que, sin embargo,   pasó desapercibida en su momento para mí: Aunque tú no lo sepas. Si os fijáis, todas las canciones son versos. Pequeños poemarios. Unos más que otros, sí es verdad…  Si bien como un buen poema, te sitúan, te zarandean, te golpean y te hacen ver.

Quizá te hacen sentir que perteneces a un grupo de personas  que estuvieron en tus zapatos en algún momento y que determina que no te veas tan loc@.

Resultado de imagen de 1001 noches austral

(Si que es verdad, que otras veces,  intentas meter en tu saco a quien no quiere estar dentro. Alguien a quien  podrías llenar de historias como en Las 1000 y 1  noches.  Entonces hay que dejar que se escape por el  agujero por el que entró  y  que Sherezade se quede en el cajón. Es lo mejor para ella).

Sin embargo  yo,   leyendo El Juego de Ripper de Isabel Allende,  cada vez estoy más segura de esto de la unión de intereses, de ilusiones, es lo que nos hace ir hacia adelante, como en un equipo. Que cuando tropiezas, te den una palmadita y tiren por ti. Fúndete con alguien, creéme.

PD.
Cumplo 40 en menos de un mes. Dicen que lo veré todo desde otra perspectiva… ¿Eso qué significa? No quiero ver nada de modo distinto. Las ideas fijas me caracterizan, me persiguen y me impiden  ver más allá, de acuerdo, si bien me hicieron llegar hasta aquí. Unos cuareeeeeeeeeeeeeeenta que ya precelebré en Miyama, un restaurante japonés que me trasladó al país nipón. Para repetir.  Como tantas cosas.

Resultado de imagen de miyama castellana

Belonging to a group, a collective, people who believe in something like you makes you feel good. If you handle it gingerly, you can do differently.

All this round me while I spent a glued to the TV while enjoying Chicago Fire and The Good wife.
In the first of the series, a Department fire moves through the city and discover their lives endangered serving the community. In the second, a lawyer struggling to cope amid all kinds of vital evidence. The Courts his second home and Office, the first was made. Groups, collectives.

Resultado de imagen de chicago fire

It drives me the itch to justice. Cases tangled rules, loopholes and papers. Many papers. I thought I never would but I miss that legal roll as before. Before many things. I think of it. Could gamble again to fetch a gap between stamped papers? I carry 40 but I'm not dead ...

In the search for belonging, I meet some crazy that fill my head with birds on stories or movies that I've enjoyed or that tempt me. You have to try. They are Almighty, a podcast in which cinema, literature and other tastes come together to give me roughly two hours of stories, laughter and desire to read or watch. I invite you. Ye ye may be like me.

This trend has left me agruparme, I'm not sure why, I can see in Urbanitas between verses. Another podcast where I find modern, domestic, fresh and adaptable poetry. And I hear a song of Secrets had already knew that, but went unnoticed at the time for me: Even if you do not know. If you look, all the songs are poems. Small poems. Some more than others, yes it's true ... While a good poem, you lie, you buffeted, hit you and make you look.

Perhaps you feel that you belong to a group of people who were in your shoes at one time and determines that you do not look so crazy.

(If it's true that sometimes, trying to get into your sack who does not want to be in. Someone could fill with stories like The 1000 and 1 nights. Then you have to let it slip by the hole through which Scheherazade entered and stay in the drawer. It is the best for her).

However I read The Ripper Game of  Isabel Allende, whenever I am more certain of this union of interests, illusions, is what makes us go forward as a team. When you stumble, you get a pat and pull yourself. Merge with someone, believe me.

Resultado de imagen de juego de ripper

PD.
40 fulfill at least one month. They say I'll see everything from a different perspective ... What does that mean? Do not want to see anything differently. Fixed ideas characterize me, chasing me and prevent me from seeing beyond, I agree, although I did get here. Some cuareeeeeeeeeeeeeeenta already precelebré in Miyama, a Japanese restaurant that moved me to Japan. To repeat. Like so many things.




Comentarios

Entradas populares de este blog

Soñar despierto y volar: Hipnonautas

Nuestro cerebro es infinitamente más fantástico de lo que estamos dispuestos a admitir. Tuve la suerte de tener una coach en el trabajo que si me oyera, me diría: "Te lo dije: mira tu realidad. Depende de ti". Visualiza, visualiza... Es algo que empecé a practicar hace tiempo y que me ha ido ayudando  en muchos momentos de la vida, de esos que no crees que vendrán pero que con esfuerzo suceden. Todo este derroche de pensamientos se lo debo al espectáculo de hipnosis "Hipnonautas"*  al que acudo en el Teatro Lara, que me devuelve esa sensación que a veces casi olvido de que todo depende de nosotros. A la hora del vermut, el maestro de ceremonias es Jorge Astyaro , un tipo alto, bien parecido, que con su voz nos conduce durante algo más de dos horas atravesando fronteras entre lo real y lo imaginado. Fascinante e incomprensible a partes iguales. Una momento de Hipnonautas Me confieso algo confundida porque sí me llegó pero por temor o pereza, no sé, n

Las horas

Vuelvo enroscada en un montón de sensaciones. Unas no quiero que me invadan y otras deseo que no me abandonen nunca. No me puedo dejar llevar por el temor ni por el mal rollo y adoro sentirme tan viva. Mis tardes se hacen relativamente elásticas gracias al montón de actividades y el chute de emociones que me están regalando muchos desconocidos que he descubierto. Lo comparto contigo porque tenemos que poder con esto. Después ya veremos cómo salir de lo demás. De momento a quemar horas disfrutando de la luz. A las 17:30 todos los días, Alicia G. Rey de Mindandtangle me da la paz. Me está enseñando a hacer yoga con mi cerebro a través de sus talleres de Zentangle. Muchas gracias de corazón. Está siendo toda una experiencia. A las 18:30, Eli Kapowski me inyecta energía mientras pincha desde su balcón everyday. Otro descubrimiento que me alegra el cautiverio. La DJ del Corona. Olé tú. Sigue, sigue. Sus sesiones colgadas en Mixcloud son la bomba. El Museo de Arte Moderno

Cabezas que vuelan

Llevo un tiempo escuchando la expresión "me vuela la cabeza" o "me explota la cabeza" para referirse a algo que te cambia, que te pone las creencias o los pensamientos patas arriba. Decidí entonces enfocarme en qué me provoca eso a mí últimamente. Yo, mujer de fuertes arranques apasionados busco y trato de poner el foco. Entonces, ahí está. En mi bolso, en mi mesilla... persiguiéndome o al revés, no sé, el alucinante libro "La Paleta Perfecta" de Lauren Wager (Hoai Books, 2019): Combinaciones de colores inspiradas en el arte, la moda y el diseño. Me obliga a probar con fusiones cromáticas que no imaginaba o que no había tenido en cuenta hasta que Lauren me lo ha chivado. Esto me lleva a otra voladera de mi cabecita: el collage. Aquí entran mis colores, mis fotos y todas las locas ideas que se me ocurran en un mismo lugar. Idear lo que quiero contar y lograr sacar lo que necesito recortar. Después tocar con mis manos figuras, palabras, papel y detal