Se va el 2014, el año al que le pedí volcanes y me dio montañas rusas de esas que cuando estás arriba te preguntas por qué se te ocurrió subir. Me ha hecho más mayor por dentro y por fuera. Me hice consciente. Hoy leo que todos nos despediremos de algo en el año que se va y que nunca nadie se acaba de conocer a sí mismo con exactitud. Suscribo todo lo anterior. Por todo eso, si para el 2014 pedía lava en las venas, para el nuevo año querría aguas tranquilas, de las que te mecen y acunan, resetear mi mirada, no enmarañarme y brotar recordando códigos.. Espero que sean 365 días de razón y, de paso, que me respete el fashion system y pueda seguir coloreándolo. From Freepik.es De este modo, cierro filas y me aplaudo. En el poema de Kavafis, “Ïtaca”, se dice que “ Ten siempre en mente a Ítaca. La llegada allí es tu destino. Pero no apresures tu viaje en absoluto…” O sea, que disfrutes del camino. Besos cósmicos para quienes de verdad quieren acompa...