Ir al contenido principal

Solo sé lo que quiero

Esta mañana mientras caminaba escuché una canción de Arnau Griso, con una letra que me hizo pensar y darme cuenta de qué OMG, qué mayor soy o qué de experiencia acumulo.

Si tenéis ocasión, por favor, haced la prueba. Tachad todo aquello que juraríais que no es un obstáculo a estas alturas de la vida y que te van contando este dúo en No sé nadar:

Necesito un tutorial para vivir. Quiero ir por libre, yo soy dueña de mi destino
Si buscas a un perdido soy tu tipo. Paso de perdidos. Quiero mentes claras 
Juro que nunca aprenderé a mentir. Por propia supervivencia, hay días que te perdonas todo
Podría ahogarme en un vaso de chupito. Prefiero la leche
No me sé las capitales, Sí, y cada vez quiero lanzarme a pasear por más
ni los ríos ni montañas. Me estoy reencontrando con lo natural, cada vez más rural, oh yeah
Nunca acabo un cubo Rubbick. Lo acaban por mí, siempre 
Soy más de fuerza que de maña. Me adapto a la situación 
No sé hacer callar a un niño. Canta y baila
cuando llora y cuando grita. Invítale a cantar y a bailar, no falla
No sé cuidar a un colega cuando se crece y vomita. Retírale y deja que duerma 
No sé parar a un pesado. Quítate tú de en medio

Y así más eventos vitales que no me preocupan ya. Ahora me desvelan otras cosas y precisamente muchas no tienen que ver conmigo, no son yo.  Quiero sorprenderme. Para bien.



Love & Peace

Comentarios

Entradas populares de este blog

Soñar despierto y volar: Hipnonautas

Nuestro cerebro es infinitamente más fantástico de lo que estamos dispuestos a admitir. Tuve la suerte de tener una coach en el trabajo que si me oyera, me diría: "Te lo dije: mira tu realidad. Depende de ti". Visualiza, visualiza... Es algo que empecé a practicar hace tiempo y que me ha ido ayudando  en muchos momentos de la vida, de esos que no crees que vendrán pero que con esfuerzo suceden. Todo este derroche de pensamientos se lo debo al espectáculo de hipnosis "Hipnonautas"*  al que acudo en el Teatro Lara, que me devuelve esa sensación que a veces casi olvido de que todo depende de nosotros. A la hora del vermut, el maestro de ceremonias es Jorge Astyaro , un tipo alto, bien parecido, que con su voz nos conduce durante algo más de dos horas atravesando fronteras entre lo real y lo imaginado. Fascinante e incomprensible a partes iguales. Una momento de Hipnonautas Me confieso algo confundida porque sí me llegó pero por temor o pereza, no sé, n

Las horas

Vuelvo enroscada en un montón de sensaciones. Unas no quiero que me invadan y otras deseo que no me abandonen nunca. No me puedo dejar llevar por el temor ni por el mal rollo y adoro sentirme tan viva. Mis tardes se hacen relativamente elásticas gracias al montón de actividades y el chute de emociones que me están regalando muchos desconocidos que he descubierto. Lo comparto contigo porque tenemos que poder con esto. Después ya veremos cómo salir de lo demás. De momento a quemar horas disfrutando de la luz. A las 17:30 todos los días, Alicia G. Rey de Mindandtangle me da la paz. Me está enseñando a hacer yoga con mi cerebro a través de sus talleres de Zentangle. Muchas gracias de corazón. Está siendo toda una experiencia. A las 18:30, Eli Kapowski me inyecta energía mientras pincha desde su balcón everyday. Otro descubrimiento que me alegra el cautiverio. La DJ del Corona. Olé tú. Sigue, sigue. Sus sesiones colgadas en Mixcloud son la bomba. El Museo de Arte Moderno

10 cosas que aprendí montando en bici 10 things I learned riding a bike

Como sabéis (si eres nuev@, tómate tu tiempo y descúbrelo en entradas anteriores) me he convertido en una bike lover , o sea, que en cuanto puedo pedaleo.  Y es que todo se ve mejor en bicicleta. Quienes están contigo y lo que te rodea cambian y se hacen más especiales. Se convierten en materia que está en tu trayectoria o fuera de ella (referentes u obstáculos).  Eres tú mismo y tus piernas son las que deciden qué toca. A mí me pasa esto. Prueba tú y me cuentas. 1.  Pase lo que pase hay que pedalear.  Si te haces un viajecito, de lo único que has de preocuparte es de que tus pies activen los pedales. Nada te hace más libre y cabal que solo seguir un camino y tener que leer el suelo que se abre ante ti. La sensación de cuerpo y mente unidos no sé si la encontrarás tan fácilmente en otros momentos.  2.  Si te caes, insulta en arameo, quítate el polvo y vuelve a subirte.  Salvo que pierdas el conocimiento, levántate tras darte un buen golpe. Incorpórate y bu